"Las palabras son como las monedas, que una vale por muchas como muchas no valen por una". Francisco de Quevedo
jueves, 19 de marzo de 2015
Quienes proclaman engoladamente que la miseria es digna de respeto son
unos fariseos: sueñan con dirigir las vidas de los miserables, o ya lo hacen diariamente.
La miseria es una repugnante indignidad: hay que acabar con ella definitivamente.
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