A los que me apuñaláis por la espalda sólo os puedo decir: “¡Sigo vivo!”.
lunes, 31 de agosto de 2015
domingo, 30 de agosto de 2015
Todos tenemos un punto marujón irremediable porque nos encanta contar algo “en
primicia”: “Al vecino del 5º derecha (jajaja) no se le levanta. Su mujer, ciega de amor, ha recurrido
a reputadas actrices porno, pero que si quieres. No quiero ser pajarito
(jajajaja) de mal agüero, pero yo creo que el divorcio está al caer”.
sábado, 29 de agosto de 2015
Esta tarde he conocido a una chica en la playa y he entablado conversación
con ella, con intenciones sexuales, todo sea dicho. Mientras conversábamos ha
recibido un mensaje, y tras leerlo, me ha contado, exultante: “Ya tengo la
entrada para los toros. Sigo a ese torero (“El niño sin neuronas”) desde que vi
cómo un toro lo cogía. A punto estuvo de matarlo. Fue una faena estupenda”. Confieso que, disimuladamente, me he tocado la
polla a ver si aún estaba allí. Afortunadamente, allí seguía, minúscula y
acojonada, nunca mejor dicho. He inventado una excusa y he huido de esta mujer:
yo creo que era de Tordesillas.
Uno es capaz de convencerse de prácticamente cualquier cosa. Puede
ocurrir que te enamores de una chica hasta el aborregamiento más absoluto. Y tu
madre, erre que erre: “No te conviene, hijo. No te conviene”. Y tú, indignado y
más ciego que una patata, preguntas: "¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? No tienes
argumentos. Lo que pasa es que te cae mal porque no sabe cocinar. Y punto". Y tu
madre, hasta el moño de advertirte inútilmente, explota: “¡Porque se está acostando
con tu hermano rico, pasmao!”.
A la gente hay que ganársela con lo que le resulta placentero. Por
ejemplo, a muchos sólo les interesa un tema de conversación: ellos mismos. Habla
de sus hazañas y se alegrarán muchísimo de verte.
¡Al ladrón!, grita una mujer en la playa, pero nadie le presta
atención. Están sumergidos en sus móviles, embelesados con un vídeo interesantísimo,
ísimo, ísimo de un tipo al que su perro de diseño le hurta (jajajaja, ¡qué risa,
tía Maisa! jajajaja) el desayuno.
Conozco a unos cuantos tipos duros hasta el encefalograma plano que a falta de adjetivos contundentes,
dan furiosos puñetazos en la barra del bar.
viernes, 28 de agosto de 2015
Reclamamos más libertad, discutimos sobre ella (muchas veces sin
saberlo) dando puñetazos en las barras de los imprescindibles bares, nos
matamos por el concepto que de ella tienen los amos… Pero ciertas cosas, algunas
de ellas importantísimas, sólo las hacemos cuando no tenemos más remedio; es
decir, cuando ya no podemos elegir libremente…
jueves, 27 de agosto de 2015
Es infame y tramposo poner SÓLO imágenes de los maltrechos y
maltratados inmigrantes “invadiendo” nuestra bendita Europa. Primero hay que
poner las imágenes de estos mismos inmigrantes siendo bombardeados en sus
países de origen, y seguidamente se ponen las imágenes de cómo llegan a esta
Europa en donde todos andamos derechos y somos humanos… Así podremos entender
de una puta vez que no vienen a hacer turismo. Otra cosa bien distinta es cómo
solucionar esta tragedia. Medios hay. Por supuesto que hay. ¿Y voluntad
política?
miércoles, 26 de agosto de 2015
Se propuso demoler todos sus vicios, pero fracasó: estaban abrazados felizmente
a sus virtudes, e incluso copulando con ellas.
Cada vez que escucho a alguien decir nosotros cuando lo que procede es decir yo, sé que estoy ante un demagogo tirando a golfo.
En los psiquiátricos se desprecia a los que aman con locura.
martes, 25 de agosto de 2015
Los temas me eligen, me cercan, me acogotan… Unos me interesan, otros
no. Los segundos me los quito de encima inmediatamente. Con los primeros me
ocurre que no siempre soy capaz de llevarlos al folio en blanco de una forma presentable. Hay temas que me interesan mucho, pero me siento
incapaz de ponerlos por escrito. Quizá nunca lo sea. La verdad es que tampoco pierdo
el sueño por ello.
lunes, 24 de agosto de 2015
Hace años tuve un rollito de primavera con una preciosa cocinera china.
Un día le toqué el culo a su hermana, que, inmediatamente, se lo dijo a mi cocinera.
Esta, roja de ira (estaba rara, la verdad), me acusó de infiel tirando a guarro.
Yo alegué en mi defensa que era capaz de distinguirlas de frente, no de
espaldas. No me creyó.
domingo, 23 de agosto de 2015
Las bolsas de ciertas grandes superficies comerciales contienen un
campo gravitatorio que, en mi caso, atrae libros, libros, libros… Y cuando ya
estás en la calle, te acuerdas de que no has pasado por caja, pero sigues
caminando. “Bueno, ya vendré mañana a pagar, si eso, que se me escapa el bus”. Por
cierto, una fuente muy fiable me ha asegurado que en su caso, no sólo atrae libros, sino también ropa monísima.
Cada preso poseía un
trocito de la llave que abría la puerta de la cárcel, pero no lograban ponerse
de acuerdo a la hora de elegir a la persona “idónea” para abrir… “¿Qué un
violador tiene más derecho que un asesino? Te rajo, cabrón”. “¿Qué un
ladronzuelo está por encima de un atracador de bancos? Vete a cagar, piojoso”.
Y en este plan… Al final, abrió la puerta un concejal de urbanismo, admirado
por todos los reclusos, a cambio de una comisión.
sábado, 22 de agosto de 2015
Me gusta leer en un
banco del puerto que está muy cerca de donde se ponen, e incluso se colocan, los
pescadores de caña. De vez en cuando, levanto la vista del libro, presto
atención a sus conversaciones y me lo paso bomba. Esta tarde he presenciado
cómo un viejecito armado con una caña que seguramente le regaló alguno de los
legionarios de Escipión “El Africano”, si no el mismo Escipión, daba un repaso
teórico y práctico a un nene de esos que creen que, aunque no hayas pescado en
tu vida, si tienes dinero para comprar artilugios de pesca estás listo para
pescar. “¿Qué es esto, abuelo?” “Esto es un carrete, pero no vale para ninguna
de las cinco cañas que has comprado, atontao”.
viernes, 21 de agosto de 2015
Le digo algo a la farmacéutica, pero me contesta a los treinta
segundos, segundo más, segundo menos: “Perdona, Ginés, es que yo siempre me
entero de las cosas con retraso”. Y entonces yo me pregunto. “¿Cuántos orgasmos
tiene pendientes de disfrutar esta
mujer? Si es que tiene pendiente alguno, claro está”.
jueves, 20 de agosto de 2015
Entre los libros que saco de la biblioteca está el que, seguroseguroseguro,
voy a leer esta noche… Pero al rato de decidirme por uno (los otros lo he
reintegrado a su lugar en la biblioteca, no sin antes acariciarlos un poco,
para que no me odien), me llama una amiga sumamente tentadora (aunque sea morena
y no viva arriba, sino en un barrio cercano al mío). Miro el libro, y pienso en
mi amiga. “Ponte en mi lugar, campeón. ¿Qué harías tú si tuvieras que optar
entre una catálogo de lencería y yo? Pues eso”. Y cuando tamborileo con mis
dedos en la portada siento en las yemas el latido del mar…
Ayer cometí una negligencia de tráfico cuando iba conduciendo hacia la playa.
Pedí disculpas inmediatamente, siempre lo hago, pero al tipo no le bastó. Me
adelantó quemando gomas y ametrallándome con el pito, el del coche, puntualizo.
Yo no habrá permitido que fuera con el suyo, el del tipo, por mucha razón que
tuviera. Soy educado, pero no tonto.
miércoles, 19 de agosto de 2015
¡Ah!, el momento en que descubres que uno de tus clásicos (cada uno
tiene los suyos) detestaba, o detesta (hay
clásicos vivos), el mismo libro “imprescindible” que tú detestabas secretamente
hasta ese mismo instante, instante liberador, indudablemente. Y a partir de ese
momento, te desahogas a gusto contra ese libro “que los listos consideran lectura
obligada. ¡Pues no señor! Porque como dice el grandísimo escritor (pon el
nombre que creas conveniente), se trata de un mamotreto sobrevalorado e
indigerible, un auténtico coñazo”. Y en este plan.
martes, 18 de agosto de 2015
lunes, 17 de agosto de 2015
EPIGRAMA
Esperando comprensión, y (no me da vergüenza reconocerlo) algún que otro consejo, le conté a un celoso con solera que sentía celos de una morena esquiva y juguetona. Pero no sólo no obtuve comprensión, ni, por supuesto, consejo, sino que el hijoputa me reprochó severamente mi falta de madurez y de entereza.
Esperando comprensión, y (no me da vergüenza reconocerlo) algún que otro consejo, le conté a un celoso con solera que sentía celos de una morena esquiva y juguetona. Pero no sólo no obtuve comprensión, ni, por supuesto, consejo, sino que el hijoputa me reprochó severamente mi falta de madurez y de entereza.
“¿Me tomo un café o espero un poco, a ver si me llaman de una vez? Espero
un poco, no vaya a ser que me llamen justamente cuando vaya a tomarme el café… ¿Me
tomo un café o espero un poco, a ver si me llaman de una puñetera vez? Espero un poco, no vaya a ser que me llamen
justamente cuando vaya a tomarme el café… ¿Me tomo un café o espero un poco, a
ver si me llaman de una puta vez? Espero un poco, no vaya a ser que me llamen
justamente cuando vaya a tomarme el café”. Así durante una hora larga… “Venga,
voy a por ese café.”, me decido. Pero (ya me lo temía yo) justo en el momento
en que voy a introducir la moneda en la máquina, un compañero me grita: “¡Ginés,
te llaman de la consulta!
domingo, 16 de agosto de 2015
sábado, 15 de agosto de 2015
Cuando el olvido no puede con la memoria, interviene el orgullo, que se
obstina en negar lo ocurrido: “¿Que yo hice eso? ¿Que yo permití que semejante
mamarracho me despreciara en público? ¿Que yo bebí los vientos por esa golfa de ensueño? ¡En
absoluto!”. Y la memoria examina al chuleta desde los pies de barro hasta la
cabeza vacía, y sonríe…
viernes, 14 de agosto de 2015
Cojo una hamaca y me salgo a la calle (a mi puerta, que decimos aquí) a
leer un rato a Ángel González. Cuando siento ganas de hacer algo que sólo yo
puedo hacer por mí, dejo el libro en la hamaca y entro en casa cagando leches
(siempre apuro demasiado). Mi madre, preocupada e ingenua, me dice: “Ginés, ten
cuidado. A ver si te quitan el libro”. Yo la tranquilizo: “Si me quitan el libro,
busco al ladrón, o ladrona, y me hago su amigo”.
jueves, 13 de agosto de 2015
Fuerte oleaje. Nado un buen rato: unas veces, avanzo; otras, me dejo
llevar (la vida misma). El pirata que llevo tatuado en el hombro izquierdo
llora de felicidad. Y es que, a pesar de su aspecto fiero, es un sentimental. Cuando vuelvo al coche, me encuentro un folleto de un club de alterne
en el parabrisas.
miércoles, 12 de agosto de 2015
martes, 11 de agosto de 2015
Hace muchos años un hombre de fiar, que luchó contra Franco y sufrió
torturas escalofriantes, librero e inteligentísimo lector, me recomendó la
lectura de Josep Pla. Llevo el Cuaderno Gris en el coche, y lo releo en la
playa, que es mi biblioteca favorita… Hoy me he enterado de que quieren retirar
la placa con el nombre de este autor genial de una calle de Madrid. Mi forma de
manifestar mi absoluta discrepancia contra este disparate demagógico va a ser releer
a Pla, una vez más, esta misma tarde , después de bañarme en el mismo mar, el
Mediterráneo, que él tanto amó y del que escribió páginas bellísimas e imprescindibles,
como casi todas las que suyas, escribiera de lo que escribiera. A este paso, supongo
que el próximo en suprimir será Jaime Gil de Biedma… Así, no.
lunes, 10 de agosto de 2015
Las mudanzas tienen su origen en la Prehistoria. Las familias adoptaban
un bebé dinosaurio como mascota, y luego pasaba lo que estaba cantado que tenía
que pasar: el pequeñín se convertía en una bestia que no cabía en la cueva,
sobre todo si ésta era de protección oficial. “Nos mudaremos a otra cueva más
grande”, anunciaba el Homo erectus. Y la Homa erectus se ponía tan contenta que
le soltaba dos hostias (A.C) con mucho amor a su Homo hecho, derecho y
resolutivo. Por cierto, el masoquismo también tiene su origen en la
Prehistoria.
domingo, 9 de agosto de 2015
viernes, 7 de agosto de 2015
jueves, 6 de agosto de 2015
miércoles, 5 de agosto de 2015
martes, 4 de agosto de 2015
lunes, 3 de agosto de 2015
domingo, 2 de agosto de 2015
sábado, 1 de agosto de 2015
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