miércoles, 3 de abril de 2013


Lo que sorprende a la Casa Real no es el cambio de criterio del juez José Castro, sino que este hombre haya tenido el valor de imputar a la Infanta Cristina. Bravo por él. La imputación de la Infanta está perfectamente argumentada. El buen sentido judicial del juez Castro, y su valentía, deberían extenderse a toda la judicatura española. A ver quién se cree que esta señora no tenía parte en la malversación de fondos públicos.  Nadie. Que dejen ya de reírse de nosotros, joder.
Por cierto, la famosa frase: “la justicia debe ser igual para todos”, pronunciada por D. Juan Carlos mataelefantes I, a la hora de la verdad significa que la Fiscalía Anticorrupción va a hacer de abogada de la Casa Real, recurriendo el auto del Juez Castro. Vamos, como haría con usted o conmigo. Un trato igualitario acrisolado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario