sábado, 15 de junio de 2013

Pido disculpas de antemano por mi grandísima ignorancia, pero lo tengo que decir: me gusta mucho más Edmundo Rivero que Carlos Gardel. Es una voz más contundente, dura, voz que le otorga al tango ese carácter cínico de los peligrosos compadritos. "Sangre de pato, avivate, frate mío, te vas a morir de frío si no aprendés a escabiar". Me encanta, joder.

No hay comentarios:

Publicar un comentario